Domingo por la mañana, 10 AM, “cariño voy un segundín a recoger el motocarro a Tres Cantos….”
Tras participar en la semana solidaria tricantina recogemos bártulos y nos montamos en nuestras máquinas. Para evitar coger la carretera de Colmenar Viejo y ser arrollados por cualquier desaprensivo que todavía vuelva a casa de tomar unas copas decidimos ir campo a través, coger alguna de esas cañadas por donde todavía se puede ver, muy de vez en cuando, a uno de esos trashumantes.
Parece fácil, son sólo 30 kilómetros lo que separa Tres Cantos de nuestras casas. Visto así sencillo. Claro que lleva todo el fin de semana diluviando. Claro que tomamos el camino equivocado dirección opuesta. Claro que salimos sin llenar nuestros depósitos. Claro que no llevamos agua. Claro, claro, clarísimo.
Pronto la pista por la que circulamos comienza a estrecharse, los baches se agrandan, y sus charcos parecen más el lago michigan. Los ciclistas que se afanan por ascender las cuestas no salen de su asumbro al cruzar su camino con el nuestro. Tampoco parecen entender nuestras preguntas “Disculpa… ¿pa Madrid?”
Perdidos en mitad del monte los caminos se bifurcan y decidir que dirección tomar no resulta tarea fácil. En una de esas un charco enorme abarca de lado a lado del camino, de norte a sur, de este a oeste. La propia inercia de los motocarros nos obliga a salirnos del camino campo a través… error!! como el barco que encalla nuestras ruedas penetran en el barro que parece agarrarlas como si no quisiera dejarnos partir. Pitillo. Tras cavar durante algunos minutos que parecen horas, utilizamos una pala y una sartén como rampas para las ruedas. Pitillo. Con una cuerda un motocarro tirará del otro. Bien, nuevo error. Ahora son dos los motocarros enterrados. Pitillo. 12 AM “Cariño… no sé, no sé como hemos llegado a esto, ni tampoco como saldremos. Te llamo“. Finalmente optamos por vaciar y levantarlo a pulso. Y por fin podemos continuar con nuestra ruta.
Continuamos nuestra aventura, esta vez sin salirnos de los caminos, y tras tres horas conseguimos llegar a la autopista Madrid – Burgos. Allí nos quedamos bloqueados. Seguimos a 30 kilómetros de Madrid. Hacia atrás el campo, hacia delante la autopista por donde nuestros lentos motocarros no pueden circular. Finalmente optamos por la autopista, 1 kilómetro y cogemos la vía de servicio, ciudad del campo, San Sebastián de los Reyes, Alcobendas, y por fin Madrid!! 15:30 PM.
Sacamos varias lecciones: Si hemos vuelto de Tres Cantos llegaremos a Noruega. Nuestros motocarros son increíbles. Quizás ese señor que le dijo a su mujer que salía a buscar tabaco y nunca volvió a casa esté todavía perdido entre Tres Cantos y algún lugar del mundo.
Este próximo Viernes partiremos hacia las bodegas de Emilio Moro… jajajjaja ¿llegaremos?
La comunidad de Madrid está prohibido la circulación de vehículos a motor por caminos, y a nivel nacional por las cañadas, tenerlo en cuenta.
Un saludo
Gracias Juan! Lo tenemos muy en cuenta pero las opciones eran pocas por no decir ninguna… De todas formas las pistas por las que circulamos son las que discurren entre fincas y sin llegar a la sierra.
Seguir con vuestra aventura que es muy bonita y solidaria, y aver si os puedo ir a conocer este fin de semana en la bodega, ánimo y suerte
Vaya huevos tenéis…
Date: Sun, 30 Nov 2014 20:18:40 +0000 To: davidlucas04@hotmail.com